Parece algo tonto pero la educación en un ambiente disfuncional puede acarrear grandes problemas de sociabilizacion en la edad adulta. Tomamos como normales comportamientos tóxicos y dejamos que las personas nos pisoteen sin poner límites ni repercusiones.
Los límites son necesarios para un equilibrio emocional. No sabes cómo establecer límites?
Es sencillo. Simplemente cuando veas que esa persona te hace sentir mal o te molesta ciertas actitudes hacia tí, establece el límite.
Lo correcto sería decir de manera directa lo que no te gusta. Si no hace caso y sigue saltando tus limites, rompe comunicación.
También se puede marcar límites sin tener que decirlo de manera directa. Cómo? Cuando haga eso que te molesta, muéstrate enfadada e indiferente con esa persona durante ese tiempo. Si esa persona es observadora habrá entendido que ha hecho algo que no te ha gustado. Si aún así sigue rompiendo tus limites... Entonces es hora de plantearte si esa persona debe estar en tu vida.
El camino hacia el autorespeto y el amor propio es muy solitario. Te quedarás con las personas que mejor vibra te hacen sentir y con aquellas personas que te sientes valorada.
Volviendo al tema... Sigamos con algunos conceptos importantes.
Crecer bajo una familia narcisista puede llevar a normalizar comportamientos cómo:
- Faltas de respeto: Palabras y expresiones hirientes que acabamos dejando pasar. Dejamos que otras personas nos chillen, nos hablen mal y se aprovechen de esa falta de reacción. Esto conlleva a que la otra persona sienta derecho a maltratarte física o psicológicamente.
- Humillaciones: Al no poner límites las otras personas te pierden el valor. Algunas personas simplemente no te tendrán en cuenta, otras llegarán más allá de la burla pública y te humillarán sin remordimientos.
- Miedo al abandono o rechazo: Cuando te has acostumbrado toda la vida a demostrar que eres válida, a competir por el cariño, etc... También a su vez te lleva a ser complaciente con todo el mundo. El miedo a caer mal, a qué te aparten de su lado o no te tengan en cuenta hace que actúes de una manera desmedida en tus relaciones sociales.
¿ Cómo puedo establecer límites personales sin sentirme culpable ?
El miedo al rechazo o abandono hace que seamos complacientes con el resto, es por ésto que no sabemos decir no y siempre estamos disponibles. Tienes que establecer en tu mente la idea de no sentirte culpable ni que estás defraudando a la otra persona. Una vez te liberes de esa carga, podrás ejercer tu derecho a estar o no estar disponible para el resto.
- Cuando realmente no podemos o no queremos hacer un favor: Sé claro con la persona. No inventes excusas, las mentiras tarde o temprano se descubren.
- Sé honesta con tus principios. Si tienes una serie de valores y esa persona los roza o los sobrepasa es hora de tomar una decisión. Tienes dos opciones:
1 - Hablarlo de manera correcta con la intención de que cambie su actitud contigo.
2 - Alejarse de esa persona si observas que es imposible un cambio o un diálogo.
- Saber soltar lo que no conviene o no avanza: Esto es muy importante y un aspecto estrecho a la herida de abandono. A veces nos quedamos en sitios que nos hace daño por miedo a quedarnos solos o simplemente por no sentir que somos malas personas si abandonamos a esa persona.
Debes ser justo contigo mismo. Si el ambiente o el lugar donde estás sientes que no eres valorado, te sientes vacío o simplemente esa relación no avanza, hay que tomar la idea de soltar y seguir tu camino.
Poner límites personales no te hace ser mala persona, simplemente estas respetándote a ti misma, porque sabes tu valor y sabes lo que mereces. A medida que vas sufriendo decepciones o desengaños, la edad y la madurez te va poniendo cada vez más firme respecto a lo que no quieres soportar en tu vida.
Poco a poco irás ejerciendo tu derecho a ser feliz y rodearte de personas que contribuyan a hacerte crecer como persona.